¿Camisas con memoria? Ingenieros del MIT crean una fibra digital programable, con sensores e inteligencia artificial

Los investigadores del MIT (Massachusetts Institute of Technology) han tenido la suficiente capacidad para crear la primera fibra digital que detecta, almacena, analiza e interfiere la actividad en una camisa con el objetivo de realizar seguimientos del rendimiento físico, la inferencia médica y la detección temprana de enfermedades.

Yoel Fink, autor principal del estudio, dice que estas fibras digitales están destinadas para descubrir patrones ocultos del cuerpo humano , siendo que es la primera realización de un tejido que guarda y procesa datos de manera digital.

Creación de la fibra digital

La fibra se creó gracias a la colocación de miles de chips digitales de microescala de silicio cuadrados . Además, su composición es delgada y flexible, se puede enhebrar, coserse y lavarse hasta diez veces sin el temor de que se rompa. Gabriel Loke, otro autor del proyecto, afirma que “ cuando lo pones en una camisa, no puedes sentirlo en absoluto . No sabrías que estaba allí ”.

Por otro lado, puede almacenar bastante información en su memoria durante dos meses porque los investigadores pudieron leer todos los datos guardados en la fibra, desde un cortometraje hasta una canción. Así que, ¿te imaginas casarte y que tu vestido de novia recopile toda la música que ha sonado en la fiesta? Puede resultar increíble, pero los investigadores no descartan esta idea.

Este proyecto ha visto la luz verde gracias a la ayuda del departamento textil de RISD (Rhode Island School of Design) que está dirigido por Anais Missakian . Ellos se ocuparon de incorporar las fibras digitales en las mangas de las camisas.

El uso de la Inteligencia Artificial

Dicha fibra también incluye la Inteligencia Artificial a través de una red neuronal de 1.650 conexiones . Los investigadores recopilaron 270 minutos de datos corporales para determinar si la información correspondía a las actividades físicas que estaba realizando el usuario, al final, el resultado coincidió en un 96% de precisión .

De esta manera, los tejidos pueden recopilar más información en todo el cuerpo y se puede llegar a extraer patrones corporales que se desconocían gracias a su control mediante un pequeño dispositivo externo.